Ausencia irrecuparable.
Parad todos los relojes, descolgad todos los teléfonos,
impedid que el perro ladre dándole un hueso jugoso.
Silenciad los pianos, y al compás de amortiguados tambores,
sacad afuera el féretro, y dejad que entren los amigos.
Que los aviones giman y tracen círculos en el cielo
escribiendo el mensaje: " mi amigo, ha muerto".
Poned cintas de luto en los blancos cuellos de los cisnes
y que los guardias se pongan sus guantes negros de algodón.
Para mí, él era el norte, el sur, el este y el oeste
el trabajo diario, la fiesta del domingo,
mi mediodía, mi medianoche, palabras y canciones.
Pensé que el amor duraría para siempre. Estaba equivocado.
No quiero estrellas ahora. Haced negra la noche.
Retiradme la luna, oscureced el sol.
Vaciad los océanos y talad los bosques,
porque ahora nada podría hacerme ningún bien.
W.H. Auden
1 Comments:
Qué genial Auden, gracias!
"...Que los aviones giman y tracen círculos en el cielo
escribiendo el mensaje: " mi amigo, ha muerto"...
By emmanuel taub, at 8:01 p. m.
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